jueves, 31 de marzo de 2011

La atropella un Camión de Lipasam y el médico certifica muerte natural

Se llamaba Begoña Aldecoa, más conocida por Miren, contaba con 84 años, cuando a principios del mes de febrero del presente, paseaba por la callecita peatonal que han abierto recientemente detrás del edificio de Geron, en la carretera Carmona. Estos datos en un principio ni dicen nada querido lector, pero si les digo que en ese mismo momento, un camión de Lipasam se disponía a dar marcha atrás, ya se pueden imaginar, ella ni se lo esperaba cuando el camión, interrumpió de manera brusca en una calle PEATONAL, arrollandola. Ella solicita un teléfono móvil, y le dice a sus compañeras de congregación que ha sido atropellada por un camión de Lipasam, y la trasladan en ambulancia hasta el hospital Virgen Macarena. Allí es intervenida quirúrgicamente de urgencia, donde fallece. Hasta aquí, lo que te llama la atención de esta historia es que un camión de Lipasam interrumpa marcha atrás en una calle peatonal, sin tener la precaución necesaria. Bien, pero lo peor del caso, es que el cirujano que la interviene, informa y certifica que la muerte se debe a CAUSAS NATURALES. Hombre, naturalmente, si te arrolla un camión, lo normal es que mueras, pero no creo que se deban a causas naturales. Miren, era una señora de 84 años, pero activa como ella sola. Matemática de carrera, había impartido clases en los centros de la SA.FA., pertenecía a una congregación de misioneras, daba clases a inmigrantes sin recursos, daba apoyo moral y social en los centros escolares del Polígono Sur, y sobre todo tenía una familia, que creo no se merecían tal falta de respeto. Miren provenía de una familia acaudalada del País Vasco, enamorada de Sevilla y comprometida con los más necesitados. Pero sobre todo, inteligente, se adelantó a la jugada, avisó de quién le había atropellado, y gracias a esto, se supo que el médico en cuestión, además de la más absoluta falta de respeto hacia los pacientes y sobre todo a la profesión que desarrolla, es un mentiroso que encubre a un ente público, y la cuestión es , ¿cuántos casos se han podido dar de este tipo?, ¿es una práctica habitual el tapar las infracciones y DELITOS de los entes públicos?, ¿por qué los periódicos no se han hecho eco de esta noticia?, ¿qué intereses intentaba salvaguardar el medicucho en cuestión?

1 comentario:

  1. aquí solo hay dinero para los ERES...
    ah y pa Ivan el Terrible... hijo de Chaves Bronson...

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